Aunque si tenemos niños en casa sabes que hay que estar pendiente de ellos a todas horas, es cierto que durante los meses de verano están mucho más expuestos a peligros como consecuencia del ocio del que disfrutan en sus vacaciones. Playa, piscina, sol, bicis, juegos… Actividades de lo más divertidas para ellos pero en las que no debemos relajarnos ni un poquito mientras las practican.
Con algunos consejos sencillos, tener a los pequeños terremotos a salvo y bajo control resultará de lo más fácil. Así, todos disfrutaremos de un verano juntos y sin percances. ¡Vamos allá!
Consejos para la playa y la piscina
La playa y la piscina son los dos escenarios donde más tiempo pasamos en verano y, a su vez, donde más riesgos existen.
- Supervisión constante: No debemos delegar la vigilancia de nuestros hijos en socorristas ni en otros niños más mayores. Son nuestra responsabilidad y por tanto, debemos tenerlos en nuestro campo de visión en todo momento.
- Chaleco de seguridad o manguitos: Si tenemos niños pequeños que todavía no se defienden bien en el agua, lo más seguro es ponerle algún complemento de seguridad durante toda la estancia en la playa o en la piscina.
- Proteger la piel: Debemos proteger la piel de los peques con un factor especial para ellos independientemente de que estemos con ellos casi todo el tiempo en la sombra. Además, debemos volver a reforzar esa protección cada poco tiempo. El sol va moviéndose y la posibilidad de que se quemen la piel, también.
- Beber mucha agua: Los peques juegan y juegan durante horas y en muchas ocasiones no salen de la piscina o no dejan de correr por ahí. Es nuestra responsabilidad estar pendientes de que beban agua o zumos de frutas para mantenerlos hidratados en todo momento y evitar golpes de calor.
Otros consejos generales
Para planes fuera del agua y el sol como un evento deportivo, un día en el parque de atracciones, un cine de verano o un concierto es recomendable atender a estas recomendaciones.
- Punto de encuentro: Si el niño no es muy pequeño, podéis establecer un lugar donde encontraros en caso de despiste. Lo mejor es buscar un lugar que destaque y que se encuentre en un lugar alto que se puede ver desde diferentes puntos. Por ejemplo, una noria, una señal luminosa de un restaurante y hotel, una escultura…
- Teléfono de contacto: Nunca está de más darles un papel con vuestro número de teléfono y nombre para que, en caso de que el peque se pierda, alguien pueda llamaros por él. Pueden llevar esta información en un divertido colgante, en una pulserita o en un papel que quieran llevar encima siempre.
¿Qué te han parecido estos consejos? Si tienes alguno más que puedan ayudar a otros padres, ¡estaremos encantados de leerlos!
?¡Desde Distria os deseamos un verano FELIZ!?
