Tenemos una misión: ir en busca de las endorfinas. Sí, porque con la entrada de la estación que más nos altera, la famosa primavera, se avecinan cambios que lo trastocan todo. Llegan algunas alergias, altibajos en el estado de ánimo, alteraciones en la temperatura y un recién estrenado cambio de hora que nos da más tiempo de sol durante el día. ¡Para salir loco!
Encontrarse bien y ser feliz siempre está de moda, es algo que debemos tener como prioridad para así dar lo mejor de nosotros mismos en cada ámbito de nuestra vida. Muchas veces, el estrés de nuestro día a día nos impide tener esos minutos de paz y nos aleja de esa desconexión con el exterior para conectar con nuestro yo interior. »No tengo tiempo», »llego demasiado cansad@», »no lo necesito», »cuando llego a casa aún me quedan muchas cosas por hacer»… ¡Stop! ⛔
Desconecta
Pulsar el botón de apagado de nuestra mente puede hacerse de muchas formas. Algunas requieren de movimiento físico, otras requieren de todo lo contrario. Ambas opciones son igualmente válidas para decir adiós al estrés de nuestra cabeza y darle la bienvenida a esas endorfinas que tanto bien nos hacen.
1. Haz deporte
Si no es algo que hayas valorado anteriormente y lo único que se te viene a la mente es »¡qué pereza!», debes saber que el deporte no siempre es sinónimo de hacer una maratón o competir en unas olimpiadas. Existen pequeñas rutinas que no cambiarán demasiado el horario semanal y que mantendrán tus pulmones a salvo.
- Pasear con ritmo ligero por el parque más cercano, por la orilla del río de tu ciudad o por esas rutas verdes que toda zona urbana tiene, son la oportunidad perfecta para ir empezando a mover el cuerpo y prepararlo para futuros ejercicios más fuertes.
- Nadar también es una actividad sencilla accesible para todos gracias a las piscinas municipales y por qué no, a la piscina desmontable que puedes tener en tu propio jardín. En el caso de la piscina municipal, puedes nadar sol@ o puedes apuntarte a clases con un horario que te obligue a no faltar ningún día.
- Senderismo. Si te gusta la naturaleza, seguro que encuentras algún grupo de personas en tu zona que salen a practicar senderismo por los alrededores. Una buena forma además, de conocer gente nueva con la que compartir aficiones.
Como ves, puedes buscar las endorfinas en el deporte sobre tierra o en el deporte acuático. ¿Cuál prefieres?
2. Relájate
La sustancia de la felicidad no depende exclusivamente de realizar una actividad concreta, muchas veces solo es necesario relajarse. Si dispones de poco tiempo basta con ponerte una canción y dejar la mente en blanco. Sin embargo, si cuentas con un rinconcito especial en casa, quizá sea un buen momento para instalar un jacuzzi hinchable o un espacio para practicar yoga.
Date un baño de agua caliente, pon música de fondo, piensa en cosas agradables y medita. Olvida el reloj y tus tareas de mañana, tan solo déjate llevar por todo aquello que te aporta cosas positivas y que te generan una sensación de paz, porque ahí están las endorfinas.
3. Dormir
El descanso es tan fundamental como mantenerse activo. En el alocado mundo en el que nos movemos a diario, muchas veces pensamos en que dormir está sobrevalorado. Madrugar con la misma intensidad con la que trasnochamos no es saludable y debemos caer en la cuenta que tener las horas de sueño recomendadas por lo profesionales cada noche, es más que necesario.
Estés donde estés, en casa o de vacaciones, tener una noche de sueño completa no es negociable. En tu colchón de siempre o sobre tu cama de aire, duerme. Un sueño satisfactorio es causa de un buen estado de ánimo y de tener la energía necesaria para afrontar el día con buena actitud.
Endorfinas… ¡os hemos encontrado!
